El talento sénior, es decir, los profesionales de más de 50 años, “serán esenciales para la recuperación económica post-Covid”. Esa es una de las conclusiones del informe Tendencias Talento 2021 realizado por la consultoría global de comunicación y asuntos públicos Llorente y Cuenca (LLYC).
El informe señala, además, que lo que se espera de los líderes de las empresas es que “involucren a todos los trabajadores para crear una cultura propicia a la innovación“. También valora que las empresas tengan “una ocasión inmejorable” para desprenderse de “capas innecesarias de complejidad” que lastran muchos de sus procesos, beneficiando en el camino a un talento al que se valora por sus resultados, eficacia y compromiso.
El socio y director senior de Engagement de LLYC, David González, ha afirmado que “este es un momento clave para el futuro de las compañías y la relación con el talento debería estar en el centro de las decisiones que se tomen“.
En concreto, ha afirmado que es necesario que se piense y refuerce la cultura “en un contexto de desincronización y deslocalización”, que se apueste por la formación como una clave para obtener ventajas competitivas y que se generen “lazos de comunicación” más sólidos con el activismo creciente entre los empleados.
En Tendencias Talento 2021, se incide en que las empresas tendrán que ofrecer modelos más flexibles de relación entre el trabajo y la vida personal para no “correr el riesgo de perder a algunos de sus mejores trabajadores”. Asimismo, se señala que abordar la necesidad de adquirir nuevas competencias y el reciclaje profesional del talento en las compañías es “más crucial que nunca”.
“Las capacidades digitales van a ser pronto un ‘commodity’ básico en muchas empresas. Además, algunos estudios revelan que el 91% de las compañías esperan que la habilidad más demandada próximamente sea la creatividad“, según dice el estudio.
LLYC también traslada a las empresas que será necesario que establezcan instrumentos internos para escuchar a tiempo y detectar las preocupaciones de los empleados con suficiente margen de maniobra para no caer en una “política reactiva”.
Por otro lado, cree que los managers tendrán que reinventar su manera habitual de gestionar equipos si gran parte de ellos trabaja en remoto. “La empatía será una de las claves para mantener la conexión humana de los equipos”, dice el estudio, que alerta de que la productividad conseguida “puede ser solo un objetivo si no se presta atención a otros ámbitos”.
De cara a los próximos meses, ve necesario que las empresas creen una nueva etiqueta digital que ha de contemplar elementos “tan importantes” como el derecho a la desconexión o el respeto a la flexibilidad de horarios para que puedan adecuarse a las circunstancias particulares de cada uno.
Respecto al teletrabajo, el estudio señala que el trabajo a distancia ya estaba ganando terreno antes de que llegara la pandemia y que ahora existe la oportunidad de acelerar este cambio cultural.
“Las oficinas no serán las mismas y deberán convertirse en experiencias productivas, significativas y memorables para los empleados. Un espacio de inspiración y conexión entre personas, un lugar donde se fomente el aprendizaje y el desarrollo continuo“.
Por último, pone de relieve lo necesario que es que las organizaciones generen estrategias efectivas para abordar los efectos de salud mental que la pandemia pueda estar generando en sus empleados.
El cuidado de personas con Alzheimer y otras demencias es un desafío significativo tanto para…
El envejecimiento es una fase inevitable de la vida, pero no debe significar una pérdida…
Internas cuidado mayores Bilbao En el corazón de Bilbao, ServiHogar365 se compromete a proporcionar un…
La nutrición deportiva es un componente esencial para cualquier atleta, ya sea profesional o amateur.…
En el panorama del cuidado y la asistencia domiciliaria, Jesús y Quini Servicios continúa destacándose…
La estética dental va más allá de la funcionalidad de la boca, brindando una mejora…
Esta web usa cookies.